Rompiendo el ciclo de los padres ausentes


2022-07-04 | Las decisiones que tome en su vida no tienen por qué ser las mismas que tomó su padre. 


Por Danny Huerta

Un Legado Familiar

Jorge era general del ejército, y para 1950, cuando las guerras mundiales ya habían terminado y la prosperidad iba en aumento, disfrutaba de los beneficios de su alto rango. En casa estaban su esposa y sus dos hijos, pero constantemente elegía su carrera, su adicción al alcohol y la búsqueda de mujeres por encima de su familia. Eventualmente, Jorge dejó a su esposa e hijos y murió, solo, de insuficiencia cardíaca y hepática causada por la bebida. No tenía idea de que su elección de ser un padre ausente impactaría a sus futuras generaciones, quienes tendrían que enfrentarse a la decisión de romper el ciclo.

Sus dos hijos, Juan y Jeremías, crecieron y se enfrentaron a las mismas decisiones que su padre había enfrentado alguna vez. Juan eligió seguir los pasos de su padre. Tenía un título prestigioso e hizo una gran fortuna, y recurrió a las ganancias materiales del mundo para tratar de sentirse satisfecho. Se casó seis veces, pero terminó solo y sin nunca haber encontrado la satisfacción. Jeremías, sin embargo, eligió un camino diferente. Su madre le había enseñado acerca de Dios, y decidió inclinarse hacia lo que Dios había planeado para él, que era tener una familia e hijos propios. El estilo de vida de los dos hermanos no podría haber sido más diferente.

Hoy, Juan y Jeremías tienen sus propios hijos y nietos. Los hijos de Juan crecieron sin la presencia de su padre. Fueron testigos de sus matrimonios y divorcios, y vieron cómo su familia se desmoronaba una y otra vez; ahora lidian con las mismas decisiones que tomaron su padre y su abuelo en el involucramiento con su familia. Los hijos de Jeremías han vivido una experiencia opuesta. Crecieron con su padre presente, y de su ejemplo han aprendido a estar presentes en la vida de sus propios hijos. Ellos están agradecidos de que su padre, Jeremías, haya elegido romper el ciclo y darle a su familia un legado de redención y amor, en lugar de quebrantamiento.

Los Efectos de un Padre Ausente

A lo largo de la historia, muchos padres han tomado la desgarradora decisión de dejar a sus familias. Y, a pesar de ser una situación tan dolorosa, el número de padres que abandonan a sus hijos ha ido en aumento en las últimas décadas. El impacto que un padre tiene en la vida de sus hijos no puede ser subestimado. Cuando un padre deja a su familia, ya sea física o emocionalmente, el efecto en sus hijos puede ser muy perjudicial.

Los niños que crecen sin un papá son más propensos a:

Tener problemas de comportamiento

Abandonar la escuela

Enfrentarse a la depresión, la ansiedad u otros problemas de salud mental

Tener dificultades financieras

Volverse sexualmente promiscuos y/o enfrentar un embarazo adolescente

Consumir drogas y alcohol

Volverse agresivos o violentos

Abandonar a sus propios hijos cuando se convierten en padres

Hay muchas razones por las cuales un padre puede decidir abandonar a su familia. Una razón importante puede ser el hecho de no haber tenido el ejemplo presente o positivo de un padre en su propia vida; es decir, no tener a nadie que le enseñara lo que significaba ser padre ni le demostrara el amor inquebrantable y el sacrificio que requiere la paternidad. Esta falta de ejemplo puede haber afectado su confianza y su capacidad para criar a sus hijos y puede haberle causado un miedo abrumador al momento de enfrentarse a la paternidad.

¿Cómo podemos detener esta tendencia creciente de padres ausentes? ¿Y cómo podemos romper el ciclo de devastación que deja a su paso?

El Efecto de las Ondas en el Agua

Cuando deja caer una piedrita en un estanque, ésta creará ondas en el agua. Las ondas comenzarán a multiplicarse y extenderse por el agua hasta lograr abarcar una gran distancia. Dependiendo del tamaño de la piedra, las ondas pueden incluso llegar a dañar o causar erosión en las cosas cercanas.

Al igual que las ondas en el agua, la decisión de un padre de dejar a sus hijos crea el mismo efecto, conocido también como el efecto dominó. Sus elecciones no solo afectarán a sus hijos y causarán daños en su familia, sino que también tendrán un impacto sobre todos los que los rodean. Estas decisiones pueden incluso afectar a sus nietos y bisnietos de la misma manera en que las decisiones de Jorge afectaron a sus descendientes.

Si su padre no fue parte de su vida, reflexione por un momento sobre cómo vivió esta ausencia. ¿Cómo cree que sería su ausencia para sus hijos? Y pregúntese, ¿esa es la clase de onda que quiero crear?

Sea el Autor de Su Propia Historia

Su Historia Actual

Si ha experimentado la ausencia de su padre, ya sea emocional o físicamente, sin duda se siente enojado y herido. Tal vez siente que le han abandonado o que necesita buscar afirmación en distintos lugares. También puede sentir miedo: miedo al fracaso, miedo al rechazo, miedo a lastimar a sus hijos de la misma forma en la que fue lastimado por su padre.

¿Cómo es que se relacionan la ausencia de su padre y las cosas que ha experimentado en el pasado con el hombre que es hoy y lo que está enfrentando en el presente? ¿Y cómo esas experiencias le moldearon y han matizado su forma de vivir la vida? Nuestras percepciones pueden convertirse en creencias, y nuestras creencias en comportamientos.

¿Existen creencias y comportamientos que le gustaría cambiar en usted?

Rompa el Patrón de Pensamiento

¿Cuántas veces ha escuchado a un hombre, tal vez incluso a usted mismo, decir que no quiere ser como su papá, pero parece estar convirtiéndose en él?

Ahora, hagamos un par de listas. Tome papel y lápiz, su computadora o incluso su teléfono. Primero, escriba qué cosas o acciones no le gustan de su papá. ¿Qué cualidades le hubiera gustado que tuviera? ¿Qué desearía que hubiera hecho diferente?

Luego, haga una lista de las cualidades que admiraba en otros papás cuando era niño.

¿Qué cualidades admira en otros hombres hoy en día? ¿Qué cualidades le gustaría tener?

Cuando termine de escribir, revise la lista de cualidades que admira y le gustaría tener.

¿Qué cree que le hace falta para tener esas cualidades? ¿Está dispuesto a trabajar para desarrollar y construir las habilidades necesarias para tener esos atributos?

¿Qué es lo que Usted Quiere?

Varios estudios han demostrado que el cerebro humano no procesa la palabra “no”. Lo que nuestros cerebros hacen es centrarse en el tema en cuestión. Por ejemplo, si le dice a su hijo o hija: “No comas esas galletas”, pensará en esas galletas sin parar hasta que pueda comer al menos una. Debemos decirle a nuestro cerebro qué hacer, en lugar de qué no hacer. En vez de: “No comas esas galletas”, podría decir: “Tómate un yogur”.

Si usted dice que no quiere ser como su padre, su cerebro se enfocará en “ser como su padre”. Así comenzará a comportarse como él, a menos que le dé a su cerebro otra instrucción. Tome esa lista de rasgos que admira y dígase a sí mismo que así es como quiere ser. Por ejemplo, “no dejes a tu familia” se puede traducir como “voy a pasar tiempo con mis hijos todos los días”.

Escriba el Siguiente Capítulo de su Vida

Las decisiones que tome en su vida no tienen por qué ser las mismas que tomó su padre. Si él le abandonó, usted sabe que repetir ese patrón no es la mejor opción, pues esa elección podría repetirse en su familia por generaciones. Esta historia no tiene por qué repetirse en alguien más. Puede usar la historia de su vida como un pasaporte hacia otro destino. Puede elegir cómo escribir los próximos capítulos de su historia. Tome la decisión de romper el ciclo de padres ausentes en su familia.

Ya Tomó la Decisión, ¿Y Ahora Qué?

¿Qué hacer una vez que ha tomado la decisión de romper el ciclo? Puede empezar por comprometerse a amar a sus hijos y ser un padre presente. Usted no tiene que ser perfecto. Sus hijos no necesitan que sea perfecto, lo único que necesitan es que usted sea parte de sus vidas.

Después de esto, busque a cuatro hombres para que sean sus mentores. Estos hombres deben desempeñarse de diferentes formas en la vida; por ejemplo, puede elegir un pastor, un amigo, un hombre mayor y un vecino. En lugar de reunirse con los cuatro al mismo tiempo, programe horarios para tener reuniones uno a uno. Puede ir alternando con quién pasar el tiempo cada semana. Establecer un horario de este tipo es una excelente forma de ser respetuosos con el tiempo de los demás y pondrá menos presión sobre los compromisos de tiempo de cada persona.

Dígales a estos hombres lo que admira de ellos y lo que quiere aprender de ellos. El tiempo que pasen juntos puede ser un lugar para desahogarse, pero también debe ser un momento de enfoque y dirección. Asegúrense de estructurar su tiempo juntos para aprovecharlo al máximo. Por ejemplo, pueden leer juntos un estudio bíblico o un libro como “Renueva tu Corazón: Sé como Cristo” de Dallas Willards.

Asegúrese de estar aferrado a Dios para recibir su guía y su ayuda. Lea la Palabra, pase tiempo en oración todos los días y, de ser posible, encuentre un grupo de discipulado de hombres a través de su iglesia local. El viaje no siempre será fácil, pero Dios lo honrará. Él le enseñará y le hará crecer de maneras asombrosas. Él será el Padre Celestial al que podrá acudir en busca de esperanza y ayuda, si le permite desempeñar ese papel.

Caminar Junto a Otras Personas

Caminar Junto a un Papá que Tuvo un Padre Ausente

Si no tuvo la experiencia de crecer sin un padre, entonces se encuentra en una situación en la que puede ser el mentor de otros padres que sí sufrieron esa ausencia. Convertirse en padre puede ser una experiencia emocionante y aterradora al mismo tiempo. Muchos padres luchan con la necesidad de ser un papá perfecto y de mantener a sus hijos de cierta manera. Esos padres enfrentan mucho miedo e incertidumbre en el proceso de criar a sus propios hijos. Pueden tener dificultades al tratar de transitar los caminos desconocidos de la paternidad, especialmente si no tuvieron un buen ejemplo del cual aprender mientras crecían.

Un hombre cuyo padre ha estado ausente durante su vida no ha tenido la oportunidad de aprender lo que se necesita para ser padre. Esto puede hacerle sentir como si estuviera tropezando en la oscuridad sin una linterna o sin un mapa. Un hombre que ama a Jesús y tiene algo de experiencia con la paternidad puede ser la persona perfecta para brindar acompañamiento con una linterna y ayudar a guiar a otro padre a lo largo de este viaje. Para hacer esto, no se necesita llenar una larga lista de requisitos o ser el padre perfecto; todo lo que se necesita es un corazón abierto a Dios y la voluntad de dar un paso al frente y estar presente. Dios puede utilizar esa voluntad para hacer cosas asombrosas en la vida de los demás.

Ser Mentor

Ser el mentor de otros padres es una tarea muy importante, pues le brinda la oportunidad de motivarlos a tomar buenas decisiones y enseñarles habilidades que quizás no conozcan. Se trata de estar presente, hablar con ellos y caminar la vida a su lado. La motivación que usted les dé puede ayudarlos a romper el ciclo en sus familias.

Elijan un horario y la frecuencia en la que se reunirán de acuerdo con la agenda de ambos. Podría ser una vez a la semana, una vez cada dos semanas o incluso una vez al mes. Y, por supuesto, asegúrense de estructurar su tiempo juntos para que puedan aprovecharlo al máximo.

Discipulado

Los grupos de discipulado para hombres dentro de la iglesia también pueden ser un lugar increíble para que algunos padres puedan discipular a otros en su caminar con el Señor y en sus procesos de crianza. Si no existe un grupo como este en su iglesia local, considere tener una conversación con los pastores y organizar uno. Este debe ser un grupo que se reúna para algo más que compartir desayunos y salir de pesca; los miembros de este grupo deberán profundizar en la Palabra, orar juntos y apoyarse mutuamente y de manera constante para enfrentar sus responsabilidades. Este puede ser un paso importante para ayudar a otros a romper el ciclo.

Caminar Junto a un Niño que Tiene un Padre Ausente

Si mira a su alrededor, notará la gran necesidad de que los niños tengan excelentes modelos a seguir en sus vidas. No es necesario que sea parte de la familia de un niño cuyo padre se ha ido para tener un impacto positivo en su vida. Todo lo que necesita es estar dispuesto a dar un paso al frente y estar presente. Dios puede obrar a través de esa disposición y abrir puertas.

Tanto si es padre como si no lo es, usted puede hacer la diferencia en la vida de un niño. Existen muchísimos niños que jamás conocerán a sus padres, pero usted puede dar un paso al frente y mostrarles lo que significa estar presente y ser amado. Usted tiene el potencial de ayudar a desarrollar un fuerte sentido de valor y resiliencia tanto en niños como en niñas. Puede enseñar a los niños cómo ser hombres en formación. Invertir tiempo en un niño y mostrarle que está presente puede cambiar las reglas del juego para él y para su futura familia.

Considere la posibilidad de organizar un grupo en su iglesia local donde algunos papás puedan convertirse en padres sustitutos de hijos cuyos padres han estado ausentes. Este puede ser un lugar seguro para crecer en la Palabra de Dios, orar y participar en varias actividades juntos.

Padres Sustitutos o Adoptivos

Los papás sustitutos están en una posición única desde la cual pueden ayudar a llenar el vacío que deja la ausencia de un padre. Ya sea de forma permanente o temporal, un papá sustituto puede ayudar a los niños que están enojados y heridos por el abandono de su padre. Pasar tiempo con uno de estos niños y estar presente demuestra que usted está interesado en él. Los niños que se encuentran en este estadio temporal de sus vidas necesitan un sentido de pertenencia que los padres sustitutos les pueden brindar con amor.

En algunos casos, los padres sustitutos pueden adoptar a estos niños y hacerlos parte de sus familias. Otras veces, serán solo padres de acogida temporal. Pero incluso si la presencia de un niño en su hogar es temporal, puede ser parte importante de su vida durante y después del tiempo compartido con su familia. Usted podrá seguir asistiendo a eventos deportivos y programas en los que él participe, y podrá ser un apoyo para toda su familia. Demostrar que está ahí para ellos y que cuentan con su motivación y apoyo, puede romper el ciclo en sus vidas.

¿Cuál será Su Historia?

¿Cómo se ha escrito la historia de su vida hasta este momento? ¿Qué pasaría si ahora mismo decidiera aceptar esa historia tal cual es y tomara el control de la pluma para que usted mismo sea el autor de los próximos capítulos de su vida? ¿Cuál sería el título del próximo capítulo? Grite: “¡giro inesperado en la trama!” y escriba el cambio que romperá el ciclo en su vida.

Dé gracias por su vida y por todo lo bueno, lo malo y lo no tan malo que ha tenido que enfrentar. La gratitud cambia su actitud y perspectiva de una manera positiva. Dios ha enviado a su Espíritu Santo para que nos ayude. ¿Ese “ayudante” tiene un lugar en su corazón? Confíe en Su guía mientras Dios le lleva hacia las cosas nuevas que tiene para su vida. Tomar este tipo de decisiones puede ser aterrador e incómodo, pero son precisamente estas elecciones las que pueden llevarle a encontrar paz.