En que creemos





En qué creemos?

Nuestras creencias centrales están basadas estrictamente en la Biblia y no se apoyan en posturas subjetivas ni en tradiciones.

La Biblia
Nuestra creencia se basa en ella.Creemos que ha sido originada por Dios quien inspiró a escritores a los largo de 1500 años para dejarnos un único y coherente mensaje: Dios ama a cada persona y desea salvarla.Creemos que aunque los contextos sociales y culturales van cambiando, los principios y verdades de las Escrituras se mantienen vigentes y oportunos y es por medio de sus verdades que se deben resolver los asuntos de fe y conducta.


Dios
Creemos que hay un solo Dios, el Padre, El Hijo y el Espíritu Santo. Que aun siendo el Creador de todo lo que existe y de amar al ser humano con amor eterno, no puede pasar por alto sus pecados, porque es un Dios justo. Por esa causa puso en marcha su plan de salvación mediante el cual pagó por nuestros pecados y nos ofrece su perdón si creemos en Él.

Salvación
El ser humano fue creado por Dios para vivir en una relación personal y cercana con Él. Desde el principio de los días el hombre le ha dado la espalda a su Creador y ha elegido ser independiente de Él. Es esa separación la que nos incapacita para experimentar la plenitud verdadera de la vida. Como una oveja sin pastor está perdida, la humanidad sin Dios también lo está, por eso necesitamos la salvación por medio de la cual somos rescatados de nuestra forma independiente de vivir y colocados nuevamente en comunión con Dios. Esa salvación no se produce por nuestras buenas obras, sino por arrepentirnos de nuestras malas obras y creer que Dios nos ha perdonado de ellas.

Jesucristo
El Hijo de Dios, desde el principio estuvo con Él y siempre ha sido Dios. Cuando llegó el tiempo señalado por el Padre, milagrosamente por obra del Espíritu Santo fue concebido en el vientre de María de manera que comenzó a existir en forma de hombre, pero como su concepción fue divina y no humana no tuvo la naturaleza de pecado que todo humano arrastraba. Vivió en obediencia absoluta al Padre y entregó su vida inocente en la cruz como pago del precio por el pecado de cada persona, trayendo así salvación a todo aquel que cree en él.
Después de tres días de haber ofrecido su vida, el Padre lo levantó de los muertos colocándolo en la más elevada posición de honor. Un día regresará a la tierra a para completar el plan eterno de Dios.

El Espíritu Santo
Como parte de la Trinidad, el Espíritu Santo tiene un rol fundamental por ser quien ilumina el entendimiento de las personas, en primer lugar para que reconozcan su necesidad de reconciliarse con Dios y por cuanto es Él quien habita en cada creyente para darle la capacidad de ir transformando su vida de manera que adquiera la personalidad y el carácter semejante a Jesús.

Destino Humano
La muerte sella el destino eterno de cada persona. Toda la humanidad experimentará la resurrección y el juicio posterior que determinará el destino de cada uno. Quienes hayan rechazado el perdón de pecados ofrecido por Dios sufrirán condenación eterna por causa de esos pecados. Los que hayan recibido el perdón y la gracia de Dios serán recibidos para una comunión eterna con él en un ambiente de absoluta paz y bien donde disfrutarán para siempre de las recompensas por sus obras hechas en esta vida.

La Iglesia
No es el lugar al que vamos los domingos. La iglesia es lo que somos. Cada persona que ha creído en Jesucristo como su salvador ha sido hecha miembro de su cuerpo, que es la iglesia. Es la clara voluntad de Dios que los creyentes se valoren y se cuiden mutuamente como miembros de un mismo cuerpo y que se reúnan para orar, adorar, tener compañerismo y ser enseñados en las Escrituras. La iglesia es además el ámbito en que se utilizan en amor y unidad los dones y capacidades dados por Dios para edificar a su pueblo.

Bautismo
Es la expresión externa de una intención interna de ser seguidor de Jesús. La perfección no es un requisito para bautizarse porque este acto no es una recompensa por haber logrado algo, sino más bien el compromiso de caminar con Dios para ser transformado cada día más en semejanza a la personalidad de Jesús.

Santa Cena
Momentos antes de ser arrestado y sentenciado a morir en la cruz, Jesús reunió a sus discípulos y compartió con ellos una última cena. Allí les dio a comer pan y a beber vino diciendo que ese pan representaba su cuerpo y que el vino representaba su sangre y les pidió que repitieran esto en memoria de él. Por eso periódicamente seguimos compartiendo en comunidad el pan y el vino, para hacer memoria del sacrificio de Jesús por cada uno de nosotros.

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