2021-08-30 | La vida es complicada e inmensa, pero solo estamos viendo por el ojo de la cerradura
Por Miguel Núñez*
“Vi además que bajo el sol no es de los ligeros la carrera, ni de los valientes la batalla; y que tampoco de los sabios es el pan, ni de los entendidos las riquezas, ni de los hábiles el favor, sino que el tiempo y la suerte les llegan a todos. Porque el hombre tampoco conoce su tiempo: como peces atrapados en la red traicionera, y como aves apresadas en la trampa, así son atrapados los hijos de los hombres en el tiempo malo cuando éste cae de repente sobre ellos.” (Eclesiastés 9:11-12)
Después de haber probado todo lo que este mundo tenía por ofrecer, Salomón quedó frustrado y se quejó de que la vida era demasiado difícil debajo del sol; en ese momento, él tenía una perspectiva terrenal. Entonces, la idea de ver la vida por encima del sol es que podamos tener una perspectiva diferente; es que tengamos la perspectiva de la misma vida, pero en vez de verla desde nuestro punto de vista, verla desde la perspectiva de Dios. Cuando Dios dice que todas las cosas cooperan para bien, Él las está viendo por encima del sol. No nos está diciendo que todas las cosas son buenas, sino que todas las cosas, las positivas y las negativas, eventualmente cooperarán para un bien final. Ese bien final tiene que ver con Su gloria y con el gozo de Sus hijos, independientemente de que ahora mismo lo entendamos o no.
Imagínate una mansión enorme y preciosa que está cerrada con llave y la única forma de verla por dentro es mirando a través del ojo de la cerradura. Al mirar por ahí, no hay forma de que puedas ver el interior en toda su gloria; solo tendrás una visión diminuta hacia dentro. Es ilógico que concluyas que la mansión es solo lo que ves por el hoyo; ¡hay mucho más ahí dentro que no puedes ver! Así es nuestra perspectiva de la vida: ella es complicada e inmensa pero solo estamos viendo por el ojo de la cerradura. A veces concluimos que entendemos la mente de Dios o que sabemos que se olvidó de nosotros, todo basado en nuestra diminuta perspectiva. Pero la realidad es que Dios tiene una mente tan increíblemente enorme que no podemos entender en lo más mínimo.
Entonces, la perspectiva por encima del sol es la perspectiva que Dios tiene de la vida. El Señor nos da un pequeño destello de cómo esa vida luce a través de los lentes de la Palabra; con ellos puestos podremos ver lo que está ocurriendo a la luz de las Escrituras. La razón por la que se nos hace tan difícil vivir por debajo del sol es porque con frecuencia se nos olvida ponernos esos lentes; en vez, nos ponemos unos lentes humanos y mundanos que solo nos permiten ver de manera miope.
Ayudémonos a nosotros mismos y a los demás a vivir aquí debajo abundantemente, tal y como Cristo prometió mientras que esperamos por esa vida ideal que nos espera en gloria. Si vives o ves la vida por debajo del sol, verás las imperfecciones, dificultades y los deseos insatisfechos. Pero si escudriñas las Escrituras y te pones los lentes de la Palabra, podrás ver que, por encima del sol, hay una vida abundante que tú todavía puedes vivir a pesar de y en medio de las dificultades de esta vida.
*El Dr. Miguel Núñez sirve como Pastor Titular de la Iglesia Bautista Internacional en Santo Domingo y es el presidente y fundador del Ministerio Integridad & Sabiduría, que tiene como visión impactar la generación de hoy con la revelación de Dios en el mundo hispano-parlante.
Publicado con permiso: integridadysabiduria.org